¡Eclipse! ¡Marea! ¡Primavera!

Qué fin del invierno más majo, cogollos. Eclipse de sol, marea del siglo y por fin, la primavera. Inusual alineación, lo llaman. Y Violeta aprende a decir Yo. ¿Para qué quiero más?

Eclipse colador, de Ben Gililand. Gran nombre, por cierto.

No hay gota que colme el vaso

La paciencia infinita de una madre, ay, madre.

Caligrafía 1997

Lástima que algo tan majo se hiciera para insultar a alguien Me recuerda, hace unos años, cuando nosequién me confesó que sus mayores creatividades las inspiraban siempre sentimientos negativos, y yo me escandalizaba y me prometía y esto y lo otro y luego me lo he comido con patatas tantas veces... En fin, rescatando cosas de otros tiempos, qué tiempos... Y cómo son estos tiempos. Qué mejores tiempos. Qué lejanos, por lo menos.
Plis plas, a la zapatilla por detrás.